12 de agosto de 2012

Puntos suspensivos .-

Las palabras no dichas mueren en puntos suspensivos. Solemos pensar que el tiempo siempre estará de nuestro lado. Algún día, en otro momento, tal vez la próxima.
Y ahí quedan nuestras seudointenciones. Suponiendo una siguiente oportunidad.
  
Perdemos el instante, hasta a veces nos autoconvencemos de que fue lo mejor. Nos decimos: “por algo no fue”, “no se lo tenía que decir”, "todo no pasa por algo". Cuántas excusas.

En el camino se quedan los deseos, los momentos no vividos plenamente. Porque siempre pensamos que es mejor callar. No nos expone, no nos arriesga.



¿Valdrá la pena? Y la sensación de “si hubiese... “, ¿qué se hace con eso?
Olvidar, reprimir, ¿no cansa?

Se pierde el beneficio de expresar. Y con él la divina capacidad.


Las palabras no dichas mueren en puntos suspensivos...

1 comentario:

  1. casi como si lo hubiese escrito yo... me identifique en cada una de tus palabras...

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